ESTADOS UNIDOS (SDPnoticias).- Ryan Holets es un oficial de la ciudad de Albuquerque, en Estados Unidos, que tras descubrir a una mujer embarazada inyectándose heroína en plena calle, terminó adoptando a su bebé.
Todo comenzó en septiembre con una llamada de emergencia sobre el robo de una tienda, cuando el agente encontró a Crystal Champ, de 35 años, drogándose cerca del terreno. Al cuestionarla ella le aseguró que era dueña de su vida y que daría en adopción al menor.
Según cuenta su compañero de oficio, no la arrestó, sino que le consiguió donde dormir y se ofreció a ser quien adoptar al bebé aún cuando no lo había consultado con su esposa.