En el marco del aniversario luctuoso del ex presidente de México Luis Echeverría, el Sol de México ha publicado un relato en el que asegura que el ejército mexicano estuvo dispuesto a eliminarlo debido al descontento por el rumbo que estaba tomando el país, actos que habrían estado respaldados por el secretario de la Defensa Nacional, el general Hermenegildo Cuenca Díaz y gran parte de la cúpula militar.
La información publicada por el Sol de México proviene, según informan, de un documento desclasificado de la Embajada de Estados Unidos, en el cual se establece que el general Hermenegildo Cuenca Díaz, “consideró un error el apoyo que los militares dieron a Echeverría” al inicio de su sexenio.
La noticia de que los militares habrían estado dispuestos a perpetrar el asesinato de Luis Echeverría, no resulta inverosímil si se tiene en consideración que a finales de su mandato, las noticias y rumores sobre un supuesto golpe de estado comenzaron a rondar de boca en boca y en distintas publicaciones y medios de difusión, generando cierta inestabilidad política y social ante el eventual cambio de gobierno.
Además hay que recordar que dichos rumores estuvieron enmarcados por precedentes en el contexto Latinoamericano, pues países como Chile habían pasado por un Golpe de estado Militar tiempo atrás, que sumado a las disputas entre el gobierno y los empresarios conservadores, la creciente violencia en el campo y la ciudad, y los rumores de que Echeverría buscaba la reelección, incentivaron el clima de inestabilidad perfecto para que se realizara un golpe de estado por parte de los militares.
El gobierno de Luis Echeverría
Luis Echeverría Álvarez llegó al poder en diciembre de 1970, en un México con problemas generalizados en los ámbitos político y social, marcado principalmente por una creciente desigualdad económica, la pérdida de legitimidad del PRI y la poca representatividad de los intereses de las clases medias y bajas; situaciones que se vieron exponenciadas y evidenciadas tras la matanza del 68, lo que exacerbó el descontento general.
Con intención de revertir la situación, Echeverría intentó fortalecer la alianza entre el PRI y los sectores populares, para lo cual implementó estrategias como: movilizar a la clase obrera sindicalizada, reavivar al campesinado con la esperanza de una reforma agraria total, e incorporar a las clases medias al sistema político mexicano, las cuales habían quedado olvidadas, políticamente hablando, desde la década de 1950.
Sin embargo, las políticas de Echeverría no gozaron de una gran aceptación por parte de muchos sectores, principalmente por la intromisión del Estado en la economía, la postura tercermundista del presidente y algunas propuestas de leyes que amenazaban los privilegios de la clase alta. Así, el gobierno de Echeverría fue objeto de ataques por parte de grupos de poder como empresarios, el PAN y la iglesia, entre otros.
Dichos ataques, se gestaron entre otras formas a través de rumores desestabilizadores que buscaban desacreditar su mandato. Y uno de esos, fue el rumor de un supuesto golpe de estado casi al final de su sexenio, los cuales, fueron promovidos por grupos opositores de derecha y ultraderecha con la finalidad de generar una imagen negativa del mandatario, sus decisiones y su administración.
El supuesto golpe de estado contra Luis Echeverría
Las noticias sobre el supuesto golpe de estado que se perpetraría contra Luis Echeverría, marcaron como fecha para este, el 15 de septiembre de 1976 y el 20 de noviembre de ese mismo año, enmarcado por la devaluación del peso, conflictos con los Yaquis en Sonora y Sinaloa, y el conflicto con empresarios en Monterrey por la nacionalización masiva de propiedades rurales y urbanas.
En aquella ocasión, el presidente, los altos jefes militares y otros funcionarios de alto rango desmintieron el supuesto golpe de estado, acusando al ingeniero Andrés Marcelo Sada, presidente de la Coparmex, de ser el autor intelectual de estos rumores.
Según algunas versiones, señalaron que el golpe de estado contra Luis Echeverría en 1976 sería de tipo militar, mientras que otras señalan que este sería perpetrado por la fuerza política de izquierda, quien lo llevaría a cabo por la vía civil y legal sin derramamiento de sangre.
Otra versión señala que el golpe de estado sería perpetrado por los empresarios de derecha, quienes tomarían el poder del país para corregir su rumbo a favor del desarrollo económico y el saneamiento de las finanzas públicas, fuertemente mermadas.
Según la fuente, el golpe de estado estaría gestado por secretarios del propio gobierno, empresarios, militares e incluso, el mismo presidente con la intención de reelegirse y perpetuarse en el poder, noticia que se difundió de boca en boca, por medio de supuestas llamadas a medios de comunicación alertando del hecho, o noticias de radio que nunca se escucharon. Así fue el episodio de como Luís Echeverría estuvo a punto de ser eliminado por los militares.
VGB