Donald Trump se arriesgó ayer a alejarse de la base populista que le hizo Presidente al despedir a su principal altavoz en la Casa Blanca: el controvertido estratega jefe, Steve Bannon, quien vuelve al sitio web ultraconservador Breibart News.
El jefe de gabinete de la Casa Blanca, John Kelly, y Steve Bannon, han decidido mutuamente que hoy (ayer) sería el último día de Steve. Estamos agradecidos por su servicio y le deseamos lo mejor”, anunció la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, en un breve comunicado.
Con su forma de actuar y pensar, Bannon reinvindicaba una ruptura con los políticos y con los usos y costumbres de Washington.
Su profundo rechazo al “stablishment” se remonta a un día en el que se dio cuenta que George W. Bush había hecho de la política el “mismo burdel que (Jimmy) Carter”.
Asistimos al nacimiento de un nuevo orden político y mientras más entren en pánico las élites mediáticas, más fuerte se hará ese nuevo orden”, afirmó unos días después de haber asumido sus funciones en la Casa Blanca.
Pero este hombre de cabellera gris y andar peculiar, que se describe a sí mismo como “un nacionalista económico”, no duró mucho más de seis meses en la administración de Trump.
RUMORES
Después de días de rumores sobre su posible salida, Trump comunicó a sus asesores ayer que había decidido despedir a Bannon, según relataron fuentes oficiales a The New York Times.
A mí me gusta el señor Bannon, es un amigo (…) Es una persona de bien, no es un racista”, dijo Trump a comienzos de esta semana, para luego recordar que llegó “tarde” al equipo presidencial y lanzar: “Ya veremos qué sucederá con el señor Bannon”.
Rupert Murdoch, el fundador de la cadena conservadora Fox News, urgió a Trump a despedir a Bannon en una reciente cena en Nueva Jersey, y el mandatario no descartó la idea, según el Times.
Según reportes de medios, en las últimas semanas el asesor habría provocado la ira del Presidente al propiciar innumerables filtraciones a los medios para dañar a facciones rivales dentro de la Casa Blanca.
El entorno de Bannon defendió, sin embargo, que la decisión de marcharse es suya, y una fuente de su círculo dijo al diario que el asesor presentó su dimisión al mandatario el
pasado 7 de agosto.
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De hecho, Bannon, en una entrevista con Bloomberg News, dejó claro que el dejar la Casa Blanca fue su decisión. “Si hay alguna confusión por ahí, permítanme aclararla: me voy de la Casa Blanca y voy a la guerra por Trump contra sus oponentes, en el Capitolio, en los medios de comunicación y en las corporaciones estadunidenses”, manifestó.
VUELTA A SU OTRA “CASA”
Breitbart News, del que Bannon era jefe antes de unirse al equipo de Trump, anunció que el exasesor había regresado ayer como presidente ejecutivo y que había presidido la reunión editorial de la empresa.
El movimiento nacionalista-populista se hizo hoy mucho más fuerte”, afirmó el editor en jefe de Breitbart News, Alex Marlow.
Breitbart ha ganado un presidente ejecutivo que le tiene tomado el pulso a la agenda de Trump”, agregó Marlow.
Por su parte, el presidente y consejero delegado de ese portal, Larry Solov, dijo que “la expansión global” de Breitbart “se acelerará” con la vuelta de Bannon y afirmó que ahora “el límite es el cielo”.
Breitbart es un portal muy seguido por los grupos supremacistas y el propio Bannon lo describió como “una plataforma de la alt-right”, la autodenominada “derecha alternativa”, marca más joven de la ultraderecha estadunidense.
HOPE HICKS, DIRECTORA DE COMUNICACIONES INTERINA
La Casa Blanca nombró ayer a Hope Hicks como directora de comunicaciones interina, tras los cambios que han afectado al gabinete del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en las últimas semanas.
El puesto de director de comunicaciones fue ocupado por Anthony Scaramucci, un empresario de Nueva York que fue derrocado después de tan sólo 10 días en el cargo tras una descripción obscena que le hizo a un reportero de la revista The New Yorker.
Sin embargo, pese a apenas ocupar el puesto poco más de una semana, Scaramucci resultó ser una figura divisiva en la Casa Blanca, provocando la renuncia del hasta entonces portavoz, Sean Spicer, quien renunció a su llegada.
El aterrizaje del empresario neoyorquino también desembocó en la marcha del que fuera jefe de gabinete, Reince Priebus, cargo que pasó a ser ocupado por el general John Kelly, quien una vez que asumió el mando, despidió a Scaramucci de forma inmediata.
Hicks, de 28 años, fue portavoz de comunicaciones para Trump durante la campaña electoral de 2016, y trabajará mano a mano con la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, hasta que el equipo del republicano encuentre un sustituto definitivo para Scaramucci.
El predecesor de Scaramucci, Michael Dubke, dimitió en mayo después de unos tres meses en el puesto.
La búsqueda de un reemplazo permanente para el cargo es consecuencia de las numerosas filtraciones a los medios que han tenido lugar dentro de la propia Casa Blanca, así como de la constante tensión entre el Presidente y la prensa, a la que acusa de arrojar “noticias falsas”.
LAS BAJAS
Steve Bannon. Estratega jefe. Dejó ayer su cargo tras perder en las últimas semanas la confianza del presidente estadunidense, Donald Trump.
Anthony Scaramucci. Director de comunicaciones. Dejó la Casa Blanca el 31 de julio. Criticó dura y vulgarmente a sus compañeros de la Presidencia y duró diez días en el cargo.
Reince Priebus. Jefe de Gabinete. Fue reemplazado como jefe de personal de la Casa Blanca por el secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, el 28 de julio.
Derek Harvey. Asesor del Consejo de Seguridad Nacional. Dejó de asesorar a Trump tras ser despedido el 27 de julio.
Sean Spicer. Secretario de prensa. Dimitió después de que Trump nombrara al polémico Scaramucci como director de comunicaciones.
Mike Dubke. Director de comunicaciones. Renunció el 30 de mayo por motivos personales.
James Comey. Director del FBI. Trump lo despidió abruptamente el 9 de mayo por su investigación sobre la injerencia rusa a favor del republicano en las presidenciales de 2016.
K.T. McFarland. Consejera Adjunta de Seguridad Nacional. Renunció el 9 de abril y podría ser la nueva embajadora de Estados Unidos en Singapur.
Katie Walsh. Jefa Adjunta de personal. Estuvo hasta el 30 de marzo y ahora sigue militando en el Partido Republicano.
Michael Flynn. Asesor de Seguridad Nacional. Dimitió porque mintió sobre sus reuniones con el embajador ruso en Washington.
Sally Yates. Fiscal general interina. A Trump no le sentó muy bien que ella no apoyara el polémico veto migratorio que afecta a los inmigrantes de once países, en su mayoría musulmanes.
Carl Icahn. Asesor especial en reforma regulatoria. En una carta publicada en su web dijo que no quiere verse involucrado en disputas partidistas sobre su papel en la administración Trump.