1 de Noviembre 2016 (Wdc).- Berthany Thompson era una niña estadounidense de 11 años sobreviviente de cáncer cerebral. La lucha contra la mortal enfermedad fue un duro y largo proceso, sin embargo, y con ayuda de familiares y amigos logró superarla.
Berthany era una niña afortunada, había sobrevivido al cáncer, pero eso no le fue reconocido en la escuela, donde compañeros del colegio al que asistía, se burlaban constantemente de la sonrisa de la pequeña, aseguraban tenía una “sonrisa chueca”.
Los compañeros de escuela de Berthany, lo hicieron durante algún tiempo, la pequeña sufría de bullying escolar pero un mal día no aguantó las risas y burlas, por lo que al llegar a su casa, tomó una pistola y decidió ir a la cochera de su casa, tomar un arma y dispararse.
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Wendy Feucht, madre de la menor, aseguró que la pequeña estaba muy agotada y que incluso las cosas más pequeñas en esas circunstancias podrían quebrar a alguien, “Creo que ella estaba agotada. Sentía que nadie podía hacer nada por ella. La gente tiene que saber que incluso las cosas más pequeñas pueden quebrar a alguien”.
Según la versión de las autoridades, la única persona que sabía de las intenciones de la pequeña Berthany era su mejor amiga, a la cual le confesó sobre sus deseos de no vivir.
Fue incluso el padre de la amiga de Berthany quien intentó llamarle a la señora Feucht, sin lograr hablar con ella, por lo que no se pudo evitar la desgracia.
Las autoridades ya se encuentran indagando en las redes sociales y los correos de compañeros de la menor, quien perdió la vida el pasado 15 de octubre.