Laura descubrió que en el portal del Servicio de Administración Tributaria (SAT), además de su patrón real, dos patrones más desconocidos por ella.
Los patrones desconocidos emitían facturas a su nombre por mil 800 pesos quincenales a través de empresas fantasma ubicadas en Puebla y Veracruz.
El problema, sin embargo, no es inédito para Laura. En la empresa donde trabaja varios de sus compañeros de trabajo tienen el mismo problema.
Laura presentó una denuncia de su caso ante el SAT y, tras más de año y medio, se cancelaron los patrones de las empresas falsas.
El caso de Laura fue dado a conocer por Reforma, quien señala que estos patrones falsos son utilizados para lavar dinero.
El diario capitalino asegura que este método de facturas falsas con datos de personas reales no está siendo detectado con eficacia por el SAT.
Este proceso de facturación falsa con datos de personas reales puede llevar a la víctima a tener adeudos con el SAT.
En el caso de Laura, por ejemplo, le han negado su devolución de impuestos.
“En lugar de tener un ingreso a favor pueden tener un saldo a cargo y acabar con un crédito (adeudo) fiscal. Además, la carga de la prueba la tiene el contribuyente, para demostrar que no tiene otros empleadores”, explicó al diario capitalino Guillermo Mendieta, del Colegio de Contadores Públicos de México.
“Para proceder penalmente, es necesario que la dependencia realice las auditorías y, si considera que se configura un delito, dar aviso a la procuraduría”, dijo a Reforma el procurador fiscal Carlos Romero Aranda.
Con información de Reforma
rgg